Qué es una redirección web y para qué se usa

Qué es una redirección web y para qué se usa

Descubre cómo las redirecciones web pueden ser una herramienta poderosa para gestionar y mejorar la experiencia de los usuarios en tu página web. Descubre cuáles son los diferentes tipos de redirecciones y cómo utilizarlas de forma eficiente y ventajosa.

Qué son las redirecciones web

Una redirección web es un proceso que redirige automáticamente a los usuarios desde una URL a otra. Se utiliza para redirigir el tráfico de un sitio web antiguo a uno nuevo, mover páginas a nuevas ubicaciones o corregir URL incorrectas.

Las redirecciones se implementan mediante códigos de estado HTTP, como 301 (movido permanentemente) o 302 (encontrado).

Tipos de redirecciones web

Existen varios tipos de redirecciones web, cada una con su propio propósito y código de estado:

  • Redirección 301: Es permanente y notifica a los motores de búsqueda que la URL original ha sido reemplazada por una nueva de forma permanente.
  • Redirección 302: Es temporal y se utiliza para redirigir el tráfico de manera temporal mientras se realizan cambios en el sitio web.
  • Redirección 307: Similar a la redirección 302, pero garantiza que el método de solicitud original se mantenga al redirigir.

Ventajas de hacer una redirección

Es posible que estés pensando que, en vez de hacer una redirección, por qué no cambiarlo todo sin más a lo más actual, ¿verdad? Pues resulta que una redirección web tiene sus beneficios, ¡y que conocerlos te interesa bastante!

  • Mantener la clasificación en los motores de búsqueda: Las redirecciones permiten conservar el SEO y las clasificaciones de página existentes cuando se realiza un cambio de URL.
  • Evitar errores de página no encontrada (404): Las redirecciones aseguran que los usuarios no encuentren páginas no encontradas y sean redirigidos automáticamente a la nueva ubicación.
  • Mejorar la experiencia del usuario: Redirigir a los visitantes a páginas relevantes y actualizadas garantiza una experiencia de navegación fluida y sin interrupciones.

Redirigir una página web a otra en vez de sustituirlo todo minimiza los errores y garantiza que todo el trabajo de posicionamiento que has hecho durante años siga procurándote unos datos de tráfico satisfactorios.

Cómo redireccionar un sitio web a otro

Existen diferentes métodos para redireccionar una web a una nueva, pero estos son los más habituales:

  • Redirección a nivel de servidor: Se utiliza el archivo .htaccess (para servidores Apache) o el archivo de configuración del servidor (para servidores Nginx) para establecer las reglas de redirección.
  • Redirección a nivel de código: Se realiza a través de lenguajes de programación como PHP, JavaScript o Python, donde se verifica la URL original y se emite una redirección a la nueva ubicación.

Las redirecciones web son una herramienta vital en la gestión de sitios web, aunque es normal que no se te pase por la cabeza intentar hacerla por tu cuenta, ¡hay demasiado en juego!

Eso sí, ya sea porque quieres efectuar un cambio de estrategia comercial, porque te apetece cambiar de dominio a uno más atractivo, porque has encontrado uno muy bueno que te interesa tener en cartera, o simplemente porque necesitas capear un temporal o empezar desde cero, pero con gran parte del trabajo ya adelantado, no pierdes nada por preguntarnos a nosotros.

 

Hacer una redirección puede ser muy beneficioso, pero hacerla mal puede ser desastroso para tus intereses, sobre todo si hablamos de una web orientada a conversión. Por eso, si quieres dejarlo todo bien atado, lo mejor que puedes hacer es confiar en un equipo de profesionales de calidad que aseguren que todo irá como la seda durante todo el procedimiento de redirección web.