Influencers vs. Micro-Influencers: ¿cuál elegir?
Un influencer es una celebridad que cuenta con una audiencia numerosa en sus redes sociales. Debido al alcance que tiene, las grandes marcas lo eligen para comunicar diferentes mensajes, desde promociones hasta productos o servicios nuevos.
Su cuenta de Instagram, además de ser un espacio de diversión y relax, es parte de su fuente de ingresos, es decir, le pagan por publicar contenidos en su ‘feed’ o o en sus ‘stories’, ya sea con productos o con dinero dependiendo del contrato que tenga con cada marca.
Podemos reconocerlos fácilmente: además de sus miles o millones de seguidores, las cuentas de los influencers suelen encontrarse repletas de fotos de sus viajes y sus estilos de vida. Y todo lo combinan a la perfección con las marcas con las que trabajan o hacen colaboraciones.
Por otra parte, tenemos a los micro-influencers que representan una nueva oportunidad de marketing. Un micro-influencer es una persona no famosa que se dedica a un tema en particular y lo comparte en su cuenta de Instagram.
Cuenta con una pequeña audiencia que interactúa con él, comprueba sus contenidos día a día y confía en lo que va publicando porque lo consideran un experto en ello.
Ambos recursos humanos son muy útiles y ya están siendo elegidos por las marcas. Pero para entender cuál es el mejor para nuestro negocio, veamos sus 3 diferencias:
1- Alcance
Un influencer cuenta con miles o millones de seguidores. Un micro-influencer es una persona que tiene una pasión que lo motiva a publicar en sus redes sociales y ser relevante en ese particular contenido. Puede ser desde fotografía, hasta ‘cómo criar a tus hijos en el mundo 3.0’.
Las ideas que llevan a los micro-influencers a publicar sus contenidos son miles, y cada uno tiene su nicho que lo sigue a sol y sombra.
Por ejemplo, Mariano Di Vaio es un influencer, tiene millones de seguidores y publica su vida diaria en su cuenta de Instagram.
Por otro lado, Manu Pozzi puede ser considerado un micro-influencer enfocado en la fotografía y los viajes.
2- Engagement
Un influencer tiene tanto alcance que no puede contestar y tener interacción con toda su audiencia. Un micro-influencer puede hacerlo, sus seguidores son muchos menos. Esto genera mejor interacción lo que significa que su audiencia está más pendiente de lo que publica y lo considera más importante que otros contenidos.
3- Tipo de contenido
Los influencers son aspiraciones para la gente que los sigue, crean un mundo de fantasía que encaja a la perfección con lo que busca que mostremos la red social Instagram.
Los micro-influencers, por otro lado, no mantienen un estilo de vida de ricos y famosos. La impronta que tienen es mucho más parecida a la uno, comparten su rutina de manera normal y esto nos lleva a considerarlos mucho más cercanos.
¿Cuál es mejor?
No hay marketing mejor o peor, sino uno más funcional que otro. Las marcas grandes suelen optar por influencers, debido a que buscan llegar a una audiencia global. Esto, por supuesto, tiene su costo económico alto.
En cambio, lo recomendable para pequeños negocios son los micro-influencers. No van a costar tanto y son más cercanos a su público.
Pero, como toda herramienta de marketing, trabajar con un micro-influencer no siempre nos garantiza que sea efectivo. Te recomendamos empezar una acción con un micro-influencer en un momento puntual. Por ejemplo, podemos aprovechar las Rebajas de Invierno o un Black Friday y ver la respuesta.